Tras contemplar Tokyo de las alturas, regresamos al suelo, y fuimos hacia la zona Oeste de Shinjuku, donde se encuentra Kabuchiko, el "red-light district" de Tokyo. Este barrio, también tiene fama de ser de los más peligrosos de Japón, pero no lo es para nada, tan peligroso como el barrio rojo de Amsterdam, por donde se pasean los turistas con sus hijos. Bien es cierto que se dice que alrededor de 1000 miembros de la Yakuza, aún operan en el barrio, pero también se dice que pasan inadvertidos a los ojos de los turistas, nosotros, aunque vimos cosas raras, no nos encontramos al típico Yakuza con gafas de sol y un traje llamativo.
Digamos que en este barrio no te van a atracar ni nada similar, hay cámaras de seguridad, y desde hace años se está luchando contra la presencia del crimen organizado, al parecer el hueco que está dejando la Yakuza en el barrio lo están ocupando organizaciones criminales africanas, mayoritariamente de Nigeria. Si que se ven a multitud de africanos trabajando para las casas de "chicas de compañia", tanto aquí como en Roppongi. Los turistas, como nosotros, son uno de sus mayores objetivos, e intentarán que entres a alguno de estos locales. En ningún momento se pusieron pesados con nosotros, es más, les decíamos rapidamente que no, y les preguntábamos alguna cosa, y muy amablemente nos indicaban mejor de lo que cualquier japonés lo había hecho durante el viaje.
La entrada a Kabuchiko desde la estación de Shinjuku, es la más espectacular, una calle peatonal llena de clubs, iluminada con neones y flashes. en este barrio también hay teatros, cines, y restaurantes. Nos propusimos cenar en un "Mos Burguer", una cadena de hamburguesas, al estilo de la omnipresente McDonalds (hay por todos lados, muchos abiertos 24h). Mos Burguer es una franquicia japonesa, que sirve una comida con un poco más de calidad que otras, las hamburguesas están más buenas, pero son algo más pequeñas y caras que las del McDonalds. En las ciudades grandes siempre hay alguno que otro, y hay de dos tipos "Mos Burguer rojo" el estandar, con menos oferta, y el "Mos Burguer verde" de mayor oferta y calidad. A un africano de los que nos acosó para entrásemos a un club, nos hizo de intérprete para encontrarnos uno.
Seguimos dando una vuelta, pegando a la zona de clubes y neones, hay multitud de "Love Hotels", merece la pena darse una vuelta por aquí. En mitad del barrio también vimos un templo que contrastaba con la perversión del barrio, de todas maneras, esta perversión no es tan aparente como podíamos imaginar, no sabemos lo que pasará dentro de los clubes, porque no nos dejamos engatusar por los africanos que seguramente querían que pagásemos copas a precio astronómico. Al parecer, los locales de mayor perversión, están bastante ocultos para los no japoneses, donde tienen prohibida la entrada. Os recomiendo este excelente post sobre los locales de sexo en Japón.
La verdad es que en nuestro viaje por Japón nos pareció curiosa la forma que tienen de divertirse muchos japoneses, esto lo vimos sobre todo en Tokyo, Osaka e Hiroshima. A la salida del trabajo, muchos compañeros se van a las zonas de ocio a beber (reuniones que ellos denominan "nomikai"). Se pueden reunir en un Izakaya (bar japonés donde también sirven comida), pero según vimos nosotros, por la cantidad de locales y de gente que salia o entraba de ellos, los locales de "chicas de compañia" son otra opción muy recurrida para estas reuniones. En estos locales, las chicas simplemente se sientan junto al grupo de amigos, y dan conversación, encienden los cigarrillos, o rien los chistes de sus acompañantes. En teoría solo esto, pero que haya algo más detrás, en algunos casos no parece improbable. Es muy frecuente toparse con escenitas que dan los hombres de negocios, algo bebidos, y las chicas cuando se despiden a la salida de los locales. En Kabuchiko además vimos algún local de "chicos de compañia".
De este barrio también es famosa una zona con una serie de callejones pequeños, llamada Golden Gai, la cual está ocupada por pequeños bares en los que caben poco más de 5 personas más el camarero, no eran los primeros del estilo que veíamos por el viaje, en Kyoto vimos algo similar cerca de la estación, y en Osaka en el Shinsekai.
Nosotros acabamos en un bar con muy buen ambiente, el Tokyo Lounge, tomando unas cervezas, donde había preferentemente gaijins, aunque también japoneses. Al regresar al Hotel cápsula, vimos a bastante gente que hacía check-in para el horario nocturno (solo de 0:00 a 6:00). Entramos en las cápsulas y yo dormí de maravilla, bien entrada la noche oí alguna alarma, pero poca cosa, la gente sale de la cápsula y se va silenciosamente a cambiarse o ducharse a otro piso.
3 comentarios:
¿un africano hablando japonés? Debía de resultar algo chocante, no?
Y en relación al hotel cápsula: ¿se apagaban las luces del pasillo para dormir, o la luz entraba en toda la cápsula? Porque si es así... dudo mucho que se durmiera tan bien teniendo en cuenta los ruidos de los "vecinos" y del trajín.
había una luz tenue con la misma intensidad todo el día... cuando bajabas la cortinilla, había oscuridad suficiente para dormir... no tuvimos a ningún vecino de cápsula viendo pornografía por satélite (que teniamos tele en la cápsula), con lo que yo no tuve queja de ruidos
Jajajaj ayer mismo sali del metro de Shinjuku por el lado este,eran sobre las 12 de la noche e iba hacia mi hotel que esta en el lado oeste y me encontre a un monton de negros a las puertas de los putis ofreciendo.Como todo lo que he visto de Tokio,segurisimo y respetuosos.Mñana a ver si me equivovo otra vez jajajajja :D :D
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